miércoles, 29 de agosto de 2012

Ingrid Bergman


Ingrid Bergman en Casablanca (1942)

Hoy estamos de doble aniversario. Tal día como hoy, hace 97 años nació Ingrid Bergman, y hace treinta, se nos fue. Por alguna razón desconocida (en mi casa se especula que relacionada con lo de haber sido ”chica Hitchcock”), de niña la confundía con Grace Kelly, actriz que por cierto, a día de hoy, no es de mis favoritas, al contrario que la sueca.

La Bergman, fue la primera actriz en obtener 3 Oscars (hasta este año no la ha alcanzado Meryl Streep y sólo la supera Katharine Hepburn con cuatro) y según el American Film Institute  la cuarta estrella más importante en la historia del cine, por detrás de Katharine Hepburn, Bette Davis y Audrey Hepburn (con las dos primeras estoy de acuerdo, pero la tercera la encuentro más discutible. No tengo nada en contra de Audrey Hepburn, pero yo la pondría por detrás). Para los amantes de las curiosidades, señalar que ha filmado películas en 5 idiomas: sueco, alemán, inglés, italiano y francés. 

Cuentan que era una persona muy tímida, y decía que se hizo actriz porque le resultaba más sencillo ser ella misma cuando hacía de otra persona. Empezó como extra a los 16 años y a los 18 entró en la Real Escuela de Teatro Dramático de Estocolmo (donde también estudió Greta Garbo). Todavía en Suecia, se casó con su primer marido, un dentista llamado Petter Lindström  y tuvo a su primera hija, Pia.

Su primera película fue “Munkbrogreven de Edvin Adolphson, pero será la sexta, “Intermezzo”, la que le suponga el espaldarazo definitivo: David O.Selznick compra los derechos para que la vuelva a rodar en inglés y en Hollywood con Leslie Howard, por lo que se trasladará a los Estados Unidos en 1939.

En 1942 protagoniza junto a Humphrey Bogart “Casablanca” de Michael Curtiz, una película por la que nadie daba un duro, ni siquiera los protagonistas, pero que se ha convertido en un clásico, a pesar de que la crítica la recibió francamente mal en su momento. Ya sé que es una película a la que sus detractores sacan mil y un defectos, y muchos de ellos los comparto, pero a pesar de ellos, y a veces incluso por ellos, a mi me encanta. Ingrid Bergman siempre dijo que durante el rodaje, Curtiz nunca le aclaró con cual de los dos se iba a quedar Ilsa, si con Rick o con Victor Laszlo, lo que contribuyó a que su personaje tenga ese aire de desconcierto permanente que resultó tan acertado. No es que Curtiz fuera un genio de la dirección y lo hiciese adrede, es que el rodaje fue bastante a salto de mata, sin que el propio director tuviera hasta el último momento claro el final, pendientes como estaban los estudios del resultado de la guerra en Europa. Y sin embargo, ese final terminó siendo uno de los más míticos de la historia del cine.

Como curiosidad comentar, que como la Bergman era bastante alta (1,75 metros), Humphrey Bogart tuvo que usar alzas. Lo mismo le pasaría a Claude Rains en "Encadenados" (donde la Bergman protagonizó junto a Cary Grant uno de los besos más largos de la época del código Hays, superado después por el de James Stewart y Kim Novak en “Vértigo”), su primera colaboración con el maestro Hitchcock, con el que volvería a trabajar en “Recuerda”  y “Atormentada”.

Al año siguiente, 1943, la nominan por primera vez al Oscar por su papel de María en “Por quién doblan las campanas”, la novela de Hemingway que menos me ha gustado, en un papel que le pega como a mí el de sueca, aproximadamente. Ella, como siempre, consigue estar estupenda, pero sinceramente, hay que ser yanqui para ver a Ingrid Bergman y creerse que es una maqui española durante la Guerra Civil.

En 1944 la volvieron a nominar por “Luz que agoniza” y esta vez sí que se llevó la estatuilla. Volverían a nominarla en 1945 por “La campanas de Santa María” y en 1948 por “Juana de Arco”. Y es que en pleno Hollywood de la caza de Brujas y el código Hays, la Bergman era la perfecta heroína del cine políticamente correcto e inmaculado. Pero un día vio “Roma ciudad abierta” e inmediatamente escribió a Rosellini ofreciéndose a trabajar con él, impresionada con su talento. Se fue a Italia unos meses para rodar “Stromboli”, se lió con Rosellini y se quedó embarazada de su hijo Roberto.

El escándalo fue tal, que incluso provocó que la actriz fuera declarada “persona non grata” en territorio americano, lo que hizo que se exiliara en Italia, dejando a su marido y a su hija en los Estados Unidos. Se divorció de Petter y se casó con Rosellini en 1950, con quien tuvo dos hijas más, las gemelas Isabella e Isotta, para divorciarse de nuevo en 1957. En ese período, rodó 6 películas con su marido y se convirtió en la nueva musa del neorrealismo, a pesar de que fueron auténticos fracasos en taquilla.

En 1956 gana el segundo Oscar por “Anastasia”, rodada en Inglaterra, que recogió en su nombre Cary Grant, dado que hasta 1959 no volvió a Estados Unidos. En 1958 se casó con el productor teatral sueco Lars Schmidt, con quien permanece casada hasta 1975. Siempre se ha dicho que la sociedad norteamericana le perdonó, por ese retorno a la “respetabilidad”. Los norteamericanos quisieron fingir que la etapa con Rosellini había sido una aventura y que la Bergman había vuelto al redil. Pero ella no se arrepintió en absoluto, ni falta que le hacía.

A partir de entonces comenzó a alternar películas en Estados Unidos y en Europa, así como apariciones ocasionales entelevisión y teatro. En 1974, se llevó el tercer Oscar por “Asesinato en el Orient Express” y su última nominación en 1978 por "Sonata de otoño", del director sueco Ingmar Bergman. Su último trabajo antes de morir fue a finales de 1981, protagonizando la miniserie "Una mujer llamada Golda”. 

Yo siempre que veo una rubia alta vestida de azul, inevitablemente pienso en que “los alemanes iban de gris y tú ibas de azul”, y eso que la película es en blanco y negro. Por algo será.

2 comentarios:

  1. ¿Qué puedo decir yo de Ingrid que no haya dicho ya en mi propio blog? Siempre ha sido la niña de mis ojos, precisamente junto a Audrey Hepburn. Son actrices esenciales en mi vida y personas que la han acabado marcando a través del tiempo y de la distancia. Es una cosa curiosa este tipo de relación... Así que yo les otorgo el primer puesto a las dos, compartido, y por encima de Katharine y Bette, sean o no mejores actrices ;)

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  2. Ingrid bergman no fue la primera actris en ganar 3 oscares
    para cuando ella gano el tercero como actris de reparto en 1974 por asesinato en el expreso de oriente
    ya katharine hepburn habia ganado el tercero a mejor actris en 1968 por el leon en invierno asi que deberias investigar bien antes de publicar informacion incorrecta ...

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